Después de las protestas de la comunidad científica en rechazo al ajuste que está aplicando el gobierno nacional, las autoridades del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) se sumaron al reclamo. El directorio del organismo difundió ayer una declaración donde advierte que las restricciones presupuestarias previstas para el año que viene “tendrán importantes consecuencias negativas en las políticas públicas del sector de Ciencia y Tecnología de nuestro país”. Salvo los funcionarios políticos designados por el gobierno de Mauricio Macri, ya se han manifestado contra el recorte actores de todos los niveles del sistema científico.
Por los recortes al presupuesto, los ingresos a la carrera de investigador del Conicet serán el año próximo un 60 por ciento menores. La planta del organismo había sumado 943 científicos en 2015; venía aumentando su número con un plan, impulsado por el Ministerio de Ciencia y Técnica, para incrementar su planta en un 10 por ciento anual. Por eso, se estimaba que este año los ingresantes iban a estar en el orden de los 900 o 950. Pero el jueves, tras la aprobación por el Congreso del Presupuesto 2017, el directorio del Conicet hizo cuentas y resolvió que en 2017 sólo abrirá el concurso a menos de 400 becarios. El cambio implica una reducción drástica del número de investigadores y el abandono de la política de Estado destinada a impulsar la ciencia argentina.